La ablación es un ritual de iniciación realizado en varias culturas, principalmente en las tribus indígenas del Africa .Consiste en extirpar el órgano genital femenino, con el fin de controlar la sexualidad y el placer. A través de este procedimiento se rompe la cadena sexual del placer que permite a una mujer llegar al orgasmo, se suprimen los estímulos que permiten que su sexualidad sea placentera. Se practica en niñas y adolescentes entre 8 y 13 años como "entrada a la vida adulta". Cientos de víctimas han muerto a causa de infecciones y hemorragias provocadas por los procedimientos realizados en situaciones precarias.
Esta práctica, que se desconocía fuera realizada actualmente en Colombia, se ejecuta entre niñas de la etnia Embera, conformada por alrededor de 200 mil indígenas de comunidades que habitan en los departamentos de Chocó, Risaralda, Cauca y Nariño, en el occidente del país.
La polémica generada entre organismos de Derechos Humanos, grupos feministas e, incluso, representantes de la Iglesia no se ha hecho esperar. Diversos sectores condenan la práctica que es defendida por algunos líderes de la comunidad Embera, hasta el momento todos hombres.
Este ritual enmarca un problema global de discriminación contra la mujer ya que con el las niñas abandonan sus estudios para contraer matrimonio, el problema debe tratarse a partir de campañas de sensibilización y formación para hombres y mujeres ya que se trata de una clara violación contra la vida e integridad.